3.3.13

Crítica Searching for Sugar Man, imprescindible

Precioso documental sobre un músico que probó fortuna y, tras fracasar con dos discos, desapareció del mapa sin saber que era un ídolo en Sudáfrica (más que Elvis). Sixto Rodríguez es la prueba viviente de que la ficción supera la realidad. Dado por muerto, seguía vivo trabajando de albañil sin coger la guitarra. Hace 15 años, y tras una peculiar investigación, dieron con él gracias a internet. Esta película ha ganado numerosos premios, incluido el Oscar. Toca la fibra, te llega, la gente que habla lo hace con pasión, la que le falta a este hombre tranquilo que vive una segunda oportunidad con el miedo de volver a ser olvidado. Sus tres hijas ayudan a entender su relato, pero echo en falta más información, tanto personal (¿y su mujer quién es, dónde está, crió él solo a estas tres mujeres?) como profesional (¿quién le enseñó a tocar, nunca ganó dinero con su música, por qué no volvió a grabar?). Hay una pregunta que se plantea en el filme pero se deja en el aire: por qué firmaba sus canciones con diferentes nombres. Sin duda, Searching for Sugar Man, de Malik Bendjelloul, es una de las pelis del año, con una banda sonora que ya han lanzado en disco (de éste sí se lleva royalties) y cuyas canciones te sonarán. Yo recordaba Sugar Man, pero no sabía la intrahistoria de su autor. I Wonder es otra que también te sonará. Eso sí, al final te deja un poso amargo importante. Cuánta injusticia y cuánto artista habrá por ahí que no tenga una oportunidad. Y la sospecha de que la piratería es hoy como aquella censura del Apartheid: lograr una canción popular no significa que te hagas rico. Por no hablar del papel nefasto de las discográficas, intermediarias que sangran. Música y política de la mano. Imprescindible.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Qué pésima reseña. Te sugiero que antes de escribir sobre una cinta, aprendas un poco de periodismo básico (sin ofender).

Cuentas lo sustancial de la cinta, sin dejar espacio al suspenso.

Saludos.